Entre la escuela y la supervivencia
|Primera parte: Los adolescentes trabajadores de Lima
Infancia y adolescencia en el Perú y en Lima
Texte intégral
1Este capítulo proporciona algunas estadísticas básicas de los grupos de edades correspondientes a la niñez (6-11 años) y la adolescencia (12-17 años) en el Perú y Lima. Los cuatro temas centrales tratados son:
- el peso demográfico de la población menor de 20 años entre 1955 y 2005,
- la escolarización de los niños, niñas y adolescentes en 2005, especialmente las tasas de matrícula y asistencia escolar,
- la proporción de la población en estado de pobreza, por grupos de edades, entre 1997 y 2008,
- la situación del trabajo de los niños, niñas y adolescentes en el país, de acuerdo con los resultados de las últimas encuestas realizadas por ENAHO sobre el tema, en 2007 y 2008.
2Este último punto permitirá, entre otras cosas, dar cuenta de la proporción de niñas, niños y adolescentes trabajadores en situación de abandono escolar en el Perú, así como observar la heterogeneidad que caracteriza el trabajo de los adolescentes en las zonas urbanas del país.
I. La población menor de 20 años: evoluciones y tendencias
1. El peso persistente de los jóvenes en la evolución demográfica del Perú
3En su boletín de análisis demográfico número 35, Perú: estimaciones y proyecciones de población, 1950-2050, el INEI estima la población peruana en el año 2005 en 27.946.774 habitantes. En 1955, esta misma población era de 8.671.541 personas, y no dejó de aumentar en el curso de la segunda mitad del siglo xx a una tasa media anual de 2,37% (INEI). La figura 4 permite apreciar este crecimiento demográfico producido entre 1955 y 2005.
Figura 4. EVOLUCIÓN DE LA POBLACIÓN EN EL PERÚ ENTRE 1955 Y 2005 (NÚMERO DE INDIVIDUOS)
Fuente: INEI, Perú: estimaciones y proyecciones de población, 1950-2050 (2001).
4En esta evolución, es interesante observar la proporción de jóvenes menores de 20 años en la población peruana a lo largo de este periodo.
Figura 5. EVOLUCIÓN DE LA PROPORCIÓN DE JÓVENES MENORES DE 20 AÑOS EN EL PERÚ ENTRE 1955 Y 2005 (EN %)
Fuente: INEI, Perú: estimaciones y proyecciones de población, 1950-2050 (2001).
5En la figura 5 se puede observar que la proporción de jóvenes menores de 20 años en la población total comenzó a descender en la década de 1980, para alcanzar, en 2005, una reducción del 10% en comparación con la de 1955 (42,3% contra 52,3%). Esta disminución se relaciona con la desaceleración de la tasa de crecimiento demográfico cuya evolución a lo largo del periodo 1955-2005 se puede apreciar en la figura 6.
Figura 6. EVOLUCIÓN DE LA TASA DE CRECIMIENTO DEMOGRÁFICO EN EL PERÚ ENTRE 1955 Y 2005 (EN %)
Fuente: INEI, Perú: estimaciones y proyecciones de población, 1950-2050 (2001).
6La mejora del acceso de las mujeres a los métodos de planificación familiar y el incremento del nivel educativo general de la población peruana son los principales factores que explican la disminución en la tasa de crecimiento demográfico iniciada en la década de 1970 y que refleja una transición demográfica observada en todos los países de América Latina en el mismo periodo.
7En lo que se refiere a la distribución de la población peruana por grupos de edades en 2005, la pirámide de edades representada en la figura 7 permite evaluar la composición de la estructura demográfica peruana actual, es decir la importancia relativa de los diferentes grupos de edades en comparación con el conjunto de la población.
Figura 7. PIRÁMIDE DE LAS EDADES DE LA POBLACIÓN PERUANAEN 2005 (EN %)
Fuente: INEI, Perú: estimaciones y proyecciones de población, 1950-2050 (2001).
8A pesar de la transición demográfica y una mejora significativa en la esperanza de vida al nacer, la cual aumentó de 43,9 años en el periodo 1950-1955 a 69,8 años en el periodo 2000-2005 (INEI 2005), la base de la pirámide es relativamente ancha, lo que indica que la población peruana está compuesta en su mayoría por jóvenes menores de 20 años. Si bien su importancia relativa ha disminuido en un 10% en comparación con la población total entre 1955 y 2005 (véase figura 4), los jóvenes continúan representando más de cuatro de cada diez peruanos en 2005, con 11.819.731 individuos (ídem).
Figura 8. EVOLUCIÓN DE LA DISTRIBUCIÓN DE LOS GRUPOS DE EDADES EN LA POBLACIÓN MENOR DE 20 AÑOS EN EL PERÚ ENTRE 1955 Y 2005 (EN %)
Fuente: INEI, Perú: estimaciones y proyecciones de población, 1950-2050 (2001).
9Por último, es interesante observar dentro de la población menor de 20 años, la evolución de la distribución entre los cuatro grupos de edades que la componen (0-4 años, 5-9 años, 10-14 años y 15-19 años) durante el periodo 1955-2005.
10Observamos en la figura 8 que los niños de 0 a 4 años y, en una menor medida, los de 5 a 9 años eran la mayoría en la población de los jóvenes menores de 20 años en el Perú entre los años 1950 y 1990. Esta tendencia ha disminuido hasta el punto en que, en 2005, los cuatro grupos de edades que conforman la población menor de 20 años casi comparten el mismo peso demográfico. Los dos grupos de edades de 10 a 14 años y de 15 a 19 años —que corresponden a la adolescencia—pasaron de una representación del 40,8% dentro del grupo de los menores de 20 años en 1955 al 49,1% en 2005, lo que muestra su afirmación como categoría social en transición hacia la adultez, particularmente en las grandes ciudades del país.
2. La importancia relativa de los jóvenes en la urbanización del país
11Según el INEI, la distribución de la población entre las zonas urbanas y rurales muestra una tendencia inversa muy fuerte en el Perú durante el periodo 1940-2007. Si bien en 1940 la gran mayoría de la población en el Perú era eminentemente rural (64,6% contra 35,4% en las ciudades), la proporción de dos tercios/un tercio después de 67 años se ha invertido a favor de la población urbana (75,9% contra 24,1% para las zonas rurales).
Figura 9. EVOLUCIÓN DE LA REPARTICIÓN ENTRE LA POBLACIÓN URBANA Y RURAL DEL PERÚ ENTRE 1940 Y 2007 (EN %)
Fuente: INEI, censos nacionales de población 1940-2007.
12Esta inversión de tendencias ocurrida durante la década de 1960 revela una migración muy pronunciada del campo a la ciudad, en particular de la zona andina hacia las ciudades costeras del país (Lima, Trujillo, Chiclayo, Piura), las cuales son más atractivas en relación con las oportunidades de empleo y remuneración. Respecto de la urbanización del Perú durante la segunda mitad del siglo xx, datos adicionales del INEI para el periodo 1980-2005 nos permiten apreciar la cantidad de jóvenes menores de 20 años en este crecimiento demográfico de las ciudades en detrimento del campo.
Figura 10. EVOLUCIÓN DE LA REPARTICIÓN DE LOS JÓVENES MENORES DE 20 AÑOS ENTRE LAS ZONAS URBANAS Y RURALES DEL PERÚ ENTRE 1980 Y 2005 (EN %)
Fuente: INEI, Perú: estimaciones y proyecciones de población, 1950-2050 (2001).
13Podemos observar en la figura 10 que los jóvenes menores de 20 años incrementaron su presencia en las zonas urbanas del Perú entre 1980 y 2005, siguiendo así la evolución demográfica general de despoblación regular del campo en el mismo periodo. Esta tendencia de los jóvenes menores de 20 años en la urbanización es, desde luego, menos pronunciada que la observada en la figura 9 para la población total (de 65,2% en 1981 a 72,6% en 2005, es decir +7,4% contra +5% en la figura 10), pero son más de dos tercios los que actualmente viven en zonas urbanas y constituyen un grupo significativo en edad de asistir a la escuela.
II. La escolarización de los niños y adolescentes en 2005
14Abordar el tema de la infancia lleva a reflexionar sobre la problemática escolar en el Perú y en Lima. Este punto resulta crucial en la medida en que el núcleo de esta investigación toca la conciliación del tiempo de los adolescentes entre sus actividades económicas y su asistencia a la escuela, la cual se transforma, en algunas circunstancias, en abandono.
1. Aspectos generales del sistema escolar peruano
La progresión escolar
15Después de la educación inicial (básica), la escolaridad obligatoria en el Perú se divide en dos niveles: la enseñanza primaria, que dura 6 años (de 6 a 11 años), y la enseñanza secundaria, que dura 5 años (de 12 a 16 años). Véase tabla 1.
16En el sistema escolar peruano se puede “repetir de año”, lo que puede llevar a un adolescente a acabar la enseñanza secundaria después de los 16. Asimismo, tampoco es extraño que un niño se matricule por primera vez en 1er grado de primaria después de los 6 años (en particular en el medio rural), lo que implica un “retraso” en la continuación de su escolaridad.
La organización del ritmo escolar
17El año escolar en el Perú se inicia la primera semana de marzo y termina a mediados de diciembre, con varias semanas de vacaciones en el transcurso del año. La gran particularidad del sistema escolar peruano es que se divide en tres “turnos” que pueden escoger los alumnos y su familia a principios de año: el de la mañana, de ocho a una (turno mañana); el de la tarde, de una a seis (turno tarde); y el de la noche, aproximadamente de seis a nueve y media (turno noche). Esta organización del ritmo escolar en el Perú es primordial porque permite a los niños, niñas y adolescentes estar libres una parte importante del día para dedicarse a otras actividades como, por ejemplo, a una ocupación de orden económico para participar en el presupuesto familiar.
Tabla 1. PROGRESIÓN EN EL SISTEMA ESCOLAR PERUANO SEGÚN LA EDAD DE LOS NIÑOS Y NIÑAS (6 A 11 AÑOS) Y ADOLESCENTES (12 A 16 AÑOS)
Las escuelas públicas y privadas: recursos materiales y humanos opuestos
18En el Perú existen, como en muchos otros países del mundo, dos tipos de establecimientos escolares que dependen del Ministerio de Educación: los centros de educación estatales y los privados. Los primeros gozan de fondos (limitados) que provienen del Estado y los derechos de matrícula ascienden a unos S/. 40 al año (que se pagan a la asociación de padres de familia), sin contar los gastos por la compra de útiles escolares que corren a cuenta de las familias. Por su parte, los segundos se ubican casi exclusivamente en el medio urbano y funcionan como empresas privadas, con un financiamiento íntegramente asegurado con los fondos provistos por las cuotas pagadas por los padres. Estas cuotas oscilan entre S/. 150 y S/. 1.000 al mes, dependiendo de la notoriedad, la calidad de la institución, así como de los servicios complementarios ofrecidos a los alumnos (comedores, reforzamiento del aprendizaje del inglés o de la informática, por ejemplo). Estas instituciones educativas evalúan periódicamente a sus profesores, gozan de mayor prestigio y se transforman, especialmente en Lima, en escuelas reservadas a la clase media y alta. Los datos de la tabla 2 provenientes del Ministerio de Educación dan una idea de la importancia y la distribución de los fondos asignados al sistema de escuelas públicas y privadas en el Perú.
Tabla 2. DATOS RELATIVOS A LOS ESTABLECIMIENTOS PÚBLICOS Y PRIVADOS DEL SISTEMA ESCOLAR PERUANO
Fuente: Ministerio de Educación-Dirección de Medición Educativa 2007 Disponible en : <http://www2.minedu.gop.pe/umc/>; <http://escale.minedu.gop.pe/>.
19Estas cifras dejan ver una fuerte desigualdad, tanto en términos de recursos humanos como de infraestructura, entre los establecimientos públicos y los privados en el Perú. El número promedio de alumnos por profesor es de 22,82 en el sector educativo público, mientras que en el sector privado es de 11,73, es decir casi dos veces menos. Se observa también una desproporción similar entre el número promedio de alumnos por establecimiento, que es de 103,72 en el sector público contra 82,55 en el sector privado. Estos resultados expresan las desigualdades generadas por la privatización del sistema educativo en el Perú desde hace quince años, y los horizontes de desarrollo escolar diferenciados según la posición social de las familias, entre aquellas que tienen los recursos económicos para matricular a sus hijos en un establecimiento privado y aquellas que no pueden asumir un gasto mensual tan elevado. El presente trabajo considera también este último punto, haciendo además una mención totalmente particular a los institutos no escolarizados.
Los institutos no escolarizados
20Los institutos no escolarizados son centros educativos dirigidos a niños, niñas y adolescentes que desean deshacerse de toda coacción escolar durante los días de semana para dedicarse a una actividad económica a tiempo completo, asegurándose al mismo tiempo la posibilidad de terminar la enseñanza primaria y secundaria. Con solo un día a la semana (generalmente los sábados o domingos) y menos tareas fuera del horario escolar, estos establecimientos reconocidos por el Ministerio de Educación contienen una carga horaria y educativa menor y se clasifican en el sector privado dirigido a los estratos sociales populares. Favorecen, en primer lugar, a los adolescentes que trabajan durante de la semana, pero ofrecen un programa académico objetivamente débil en comparación con el que siguen los niños en la escuela pública. En estos centros educativos se encuentra, sobre todo, a adolescentes que procuran reescolarizarse después de un abandono de la escuela durante su infancia y otros que, por el contrario, desean reducir su compromiso académico para dedicar más tiempo a su actividad económica.
2. Las tasas de matrícula escolar en 2005
21La tasa de matrícula escolar registra el porcentaje de niños, niñas y adolescentes reconocidos como matriculados en un centro de enseñanza educativa primaria o secundaria (escuela o colegio). En 2005, esta tasa se eleva en el Perú a 97,7% para los niños y niñas de 6 a 11 años (97,9% para los varones y 97,4% para las mujeres) y a 87,9% para los adolescentes de 12 a 17 años (88,8% para los varones y 87% para las mujeres) con una diferencia de casi 10 puntos entre los dos grupos de edades y con diferencias relativamente pequeñas entre los sexos (INEI 2005). Estas cifras muestran una generalización de la educación primaria entre los niños y niñas de 6 a 11 años, un fenómeno que se observa principalmente en los departamentos urbanos de la costa con tasas muy por encima del 98% e incluso cercanas al 100% en algunos casos (departamentos de Moquegua, Tumbes e Ica, con un 100%, 99,6% y 99% respectivamente). La tasa de matrícula escolar de los adolescentes entre 12 y 16 años es muy variable entre los departamentos del país (77,7% en La Libertad hasta el 98,4% en Tacna) y muestra los índices más altos en la mayoría de los departamentos urbanos ubicados en la costa (Moquegua, Tacna y Arequipa con un 95,1%, 98,4% y 96,4% respectivamente). En el departamento de Lima, la tasa de matrícula escolar de los niños y niñas de 6 a 11 años es de 98,6% (98,8% para las niñas y 98,5% para los niños, con una diferencia mínima entre ambos sexos), y la de los adolescentes de 12 a 17 años de 92,8% con un resultado mejor para las adolescentes (94,2% contra 91,7% para los adolescentes varones). Estas cifras ubican el departamento de Lima como uno de los que tienen la mayor cobertura educativa del país (cfr. anexo 4).
3. Las tasas de asistencia e inasistencia escolar en 2005
22A diferencia de la tasa de matrícula, la tasa de asistencia escolar mide la frecuencia escolar efectiva y regular de los niños, niñas (6 a 11 años) y adolescentes (12 a 16 años) previamente matriculados en un centro de enseñanza educativa pública o privada. Se complementa con la tasa de inasistencia escolar que calcula la proporción de niños (6 a 11 años) y adolescentes (12 a 16 años) que, matriculados o no en una escuela o un colegio al iniciar el año, no asisten a clases para terminar la enseñanza obligatoria encontrándose, asimismo, en una situación de abandono escolar.
23Según la Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO) realizada por el INEI en el 2005 (tabla 3), la tasa de asistencia escolar se eleva al 92,1% de los niños (6-11 años) y al 69,4% de los adolescentes (12-16 años) en todo el país. La tasa de asistencia escolar refleja una diferencia sustancial de 22,7% entre los grupos de edades, pero también difiere significativamente de acuerdo al grado de urbanización de la zona de residencia del niño o adolescente. Según los datos sobre la educación secundaria, las tasas de asistencia escolar son inferiores en las zonas rurales del país, donde solo poco más de un adolescente (12-16 años) de cada dos se encuentra en situación de continuidad escolar (55,3%). Este porcentaje aumenta considerablemente en las zonas urbanas intermedias (75,1%), y aún más en las capitales de departamento y otras ciudades importantes (82%) y Lima, donde alcanza el 80,7% de la población adolescente en edad de asistir al colegio. En cuanto a la diferencia entre los sexos, anotamos en cada grupo de edades una tasa de asistencia escolar un poco más elevada para los varones (+0,6 % para los niños y niñas de 6 a 11 años y el +1 % para los adolescentes de 12 a 16 años). Por el contrario, los adolescentes de 12 a 16 años en situación de inasistencia escolar son proporcionalmente menos numerosos en Lima que en el resto del país (el 19,3 % contra el 44,7 % en las zonas rurales del país), pero no dejan de constituir un fenómeno difundido en la capital peruana, que plantea además un problema para las autoridades escolares y políticas. Otra encuesta del INEI, realizada en 2006, precisa los principales motivos expuestos por los adolescentes para explicar lo que los conduce a abandonar la escuela (tabla 4).
Tabla 3. TASA DE ASISTENCIA E INASISTENCIA ESCOLAR DE NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES SEGÚN GRADO DE URBANIZACIÓN DE LA ZONA DE RESIDENCIA Y SEXO, EN EL PERÚ EN 2005 (EN %)
Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares 2005 (abril-diciembre).
Tabla 4. MOTIVOS DE INASISTENCIA ESCOLAR DE NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES SEGÚN ZONA DE RESIDENCIA, EN EL PERÚ EN 2006 (EN %)
Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares 2006. Trimestre III.
24En zonas rurales y urbanas (excepto Lima), los resultados indican que las causas de deserción escolar son bastante variadas: “ausencia de centros ecolares” en el campo, “problemas económicos y familiares” para la mitad de los adolescentes, pero también “falta de interés por los estudios” o “enfermedad o accidente”, son citados como motivos del abandono escolar. En Lima, la situación aparece de manera muy distinta ya que, en su mayoría, los adolescentes resaltan una sola causa para explicar su descolarización: los “problemas económicos y familiares”. Aunque la pobreza está más difundida en las zonas urbanas y rurales fuera de la capital, parece tener mayor impacto en el sentir de los adolescentes de Lima, que la señalan como principal razón de su abandono escolar: el 81,8% de ellos mencionan este factor socioeconómico, contra el 50,7% en otras zonas urbanas del país y el 51,5% en las zonas rurales donde domina la economía familiar de autosubsistencia. La encuesta del INEI también señala que los adolescentes que mencionan los “problemas económicos y familiares” como el motivo principal de su abandono de los estudios, se dedican a trabajar o realizar actividades domésticas todos los días de la semana (INEI 2006: 102). Este punto indica que la inclinación de la ocupación del tiempo de un adolescente que vive en Lima, de la escuela hacia el trabajo, tiene como principal motivo las condiciones socioeconómicas de su familia.
25Un dato complementario que proviene de la misma encuesta del INEI realizada en 2006 muestra que la tasa de asistencia escolar en la enseñanza secundaria es más elevada entre los adolescentes que pertenecen a un hogar “no pobre” (87,1%) que “pobre” (76,1%). Es importante especificar sobre este punto que los adolescentes que pertenecen a una familia “no pobre” no son necesariamente individuos no afectados por los problemas económicos. Su hogar puede estar efectivamente situado ligeramente por encima de la línea de pobreza monetaria (y ser clasificado como “no pobre”), pero aun así sentir los mismos efectos que el que se coloca justo debajo de esta línea.
III. La evolución de la pobreza entre 1997 y 2004: población total y grupos de edades
1. El indicador de pobreza monetaria
26Se define como hogares pobres a aquellos cuyos recursos son insuficientes para cubrir las necesidades básicas (especialmente las alimenticias) de cada uno de sus miembros. Se trata de un enfoque monetario de la pobreza, que no considera otras dimensiones objetivas del fenómeno, como la malnutrición, el acceso al agua potable o la esperanza de vida. Por otro lado, los elementos considerados no proceden exclusivamente de los ingresos y gastos de cada hogar, sino que también incluyen el autoabastecimiento y el autoconsumo (en particular en el caso de las familias que viven de la agricultura), así como las ayudas públicas y privadas.
- 1 Todos los individuos de la misma edad y del mismo sexo tienen en principio necesidades calóricas i (...)
27Sobre la base de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO en inglés), los nutricionistas establecen una norma calórica que sirve como punto de referencia para la medición de las líneas de pobreza relativa y absoluta, a partir de las necesidades biológicas de cada individuo de acuerdo con su edad y su sexo. Después de evaluar esta gama de necesidades en el ámbito individual1, los especialistas determinan tres grandes conjuntos que reúnen cada una de las zonas geográficas con el fin de ponderar sus cálculos según la diversidad de las estructuras demográficas del Perú. Las normas calóricas diarias determinadas por el INEI en cada uno de estos tres conjuntos son los siguientes:
- Costa urbana y rural, sierra urbana, selva urbana: 2,194 calorías,
- Sierra rural, selva rural: 2,133 calorías,
- Lima Metropolitana: 2,232 calorías (INEI 2004).
28La lista de los alimentos que forman la canasta básica de consumo alimentario fue establecida sobre la base de una encuesta realizada por el INEI en 1993 y 1994 (Encuesta Nacional de Propósitos Múltiples) que selecciona los productos más consumidos en cada una de las tres principales zonas geográficas del Perú (costa, sierra y selva). El INEI considera una canasta “real”, en la medida en que se toma en consideración las costumbres de consumo de la población, la disponibilidad efectiva de los alimentos y su precio respectivo (algunos son consumidos en el domicilio familiar u obtenidos en los comedores populares o clubes de madres). El INEI utiliza el costo de esta canasta básica de consumo alimentario como referencia para evaluar la incidencia de la pobreza en las diferentes zonas geográficas del Perú. La indigencia (pobreza extrema) corresponde a la incapacidad de una familia de asegurar el costo de esta canasta a cada uno de sus miembros. La pobreza relativa equivale a la insatisfacción económica de una canasta “global” que comprende, además de la canasta de consumo alimentario, un conjunto de bienes y servicios ligados al transporte, a la salud y a la educación y considerados esenciales para llevar una vida “digna”, lo que lleva el costo de esta canasta “global” al doble del consumo alimentario (Herrera 2001).
2. La incidencia de la pobreza entre 1997 y 2004
29Estas diferentes líneas de pobreza relativa y extrema son estimadas en cada una de las tres zonas geográficas del Perú (costa, sierra y selva) según el medio urbano, rural y el nivel de urbanización (Lima Metropolitana, capital de departamento y ciudad mediana). A partir de estas líneas, se evalúa la proporción de población en estado de pobreza relativa y extrema en todo el país en su evolución en los ámbitos local y global entre 1997 y 2004. La tabla 5 muestra la variación en las proporciones de población en estado de pobreza en el periodo 1997-2004 y ofrece una comparación entre Lima Metropolitana y el resto del país.
30En primer lugar, se puede observar que la pobreza extrema afecta poco a Lima, mientras que existe un cierto equilibrio entre pobreza extrema y pobreza relativa en el resto del país, aunque la segunda está en ascenso y representa en 2004 cerca de los dos tercios de la pobreza total en el ámbito nacional. Las proporciones de pobreza durante el periodo 1997-2004 son significativamente inferiores en Lima con relación al resto del país; pero el punto más interesante que muestra la figura 11 se refiere a la variación de este índice entre ambas fechas.
31La figura 11 señala cierta convergencia a partir del 2001 entre las proporciones de pobreza en Lima y en el resto del Perú. Después de un fuerte aumento de la pobreza en la capital entre 1998 y 2000, esta cifra disminuyó en 2001, pero volvió a aumentar de forma sostenida a partir de 2004, alcanzando un nivel superior en 11,2 puntos en comparación con el de 1997. Mientras tanto, la pobreza aumentó en el resto del país en 8,3 puntos, es decir en una proporción significativamente menor que en Lima Metropolitana.
Tabla 5. PROPORCIÓN DE LA POBLACIÓN EN ESTADO DE POBREZA (RELATIVA Y EXTREMA) ENLIMA Y EL RESTO DEL PAÍS, ENTRE 1997 Y 2004 (EN %)
Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 1997-2004.
Figura 11. EVOLUCIÓN DE LA PROPORCIÓN DE POBLACIÓN EN ESTADO DE POBREZA EN LIMA Y EN EL RESTO DEL PERÚ ENTRE 1997 Y 2004 (EN %)
Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 1997-2004.
3. La urbanización de la pobreza en el Perú desde finales de la década de 1990
32El INEI proporciona datos adicionales sobre las proporciones de pobreza entre 1997 y 2004 de acuerdo al grado de urbanización. Las tendencias entre finales del siglo xx y principios del siglo xxi figuran en la tabla 6.
Tabla 6. PROPORCIÓN DE POBREZA TOTAL EN EL PERÚ SEGÚN EL NIVEL DE URBANIZACIÓN ENTRE 1997 Y 2004 (EN %)
Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 1997-2004.
33Si bien la pobreza en el Perú predomina ampliamente en las zonas rurales, su peso dista mucho de ser insignificante en las zonas urbanas e incluso en Lima, donde en 2004 afectaba a más de un tercio de la población. Para cada una de las zonas geográficas incluidas en la tabla 6, según el nivel de urbanización (Lima Metropolitana, capitales de departamento, otras ciudades) o el carácter rural, es interesante ver la variación de las proporciones de pobreza no solo para todo el periodo (figura 12) sino también en los tres últimos años (figura 13).
34Teniendo en cuenta el periodo 1997-2004, vemos en la figura 12 que la pobreza aumentó en todas las zonas de residencia del país (urbana y rural), pero es mucho más pronunciada en las zonas urbanas y especialmente en Lima Metropolitana, donde la pobreza ha aumentado en 11,2 puntos entre estas dos fechas contra 6,2 en las zonas rurales del país. Por otra parte, si uno se concentra solo en el periodo más próximo, es decir, entre 2001 y 2004, observamos en la figura 13 que la pobreza disminuyó en todo el Perú (-2,7) y, sobre todo, en ciudades medianas y pequeñas (-12,4), pero que ha aumentado muy significativamente en el área metropolitana de Lima-Callao con un incremento de 4,8 puntos.
- 2 Otra base de datos del INEI, no publicada, muestra un porcentaje de pobreza en Lima Metropolitana (...)
35Estas dos cifras muestran entonces que, si bien la pobreza ha aumentado en general en las zonas urbanas del Perú entre 1997 y 2004, su expansión afecta exclusivamente a Lima en la segunda parte de este periodo (2001-2004). Esta comprobación confirma una variación de la curva de la pobreza, la cual marca un ascenso en Lima en estos últimos años, mientras que describe una tendencia descendiente en el resto del país. En 2004, en la ciudad de Lima, más de tres habitantes de cada diez, por nacimiento o adopción, vivían bajo la línea de pobreza2. La evolución de la pobreza en el Perú, según la base de datos disponible, muestra una indiscutible urbanización y, ante todo, en la capital. Por último, cabe señalar que estas estimaciones reflejan un nivel real de la pobreza y, por lo tanto, incluyen todas las fuentes de financiación para el consumo familiar, como las remesas del extranjero y otras ayudas de instituciones públicas y privadas.
Figura 12. VARIACIÓN DE PROPORCIONES DE POBREZA TOTAL EN EL PERÚ SEGÚN NIVEL DE URBANIZACIÓN ENTRE 1997 Y 2004 (EN %)
Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 1997-2004.
Figura 13. VARIACIÓN DE PROPORCIONES DE POBREZA TOTAL EN EL PERÚ SEGÚN NIVEL DE URBANIZACIÓN ENTRE 2001 Y 2004 (EN %)
Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 2001-2004.
4. La pobreza en Lima por grupos de edades
36La pirámide de edades representada en la figura 7 de este capítulo, pone de manifiesto el peso de los niños, niñas y adolescentes en la estructura demográfica del Perú contemporáneo y de Lima. La importancia de los más jóvenes con relación al conjunto de la población, tiene un vínculo particular con el contexto de la pobreza que predomina en el país y su capital. De acuerdo con las cifras del INEI de 2004 (Encuesta Nacional de Hogares), la niñez y la adolescencia son grupos de la población peruana más afectados por la pobreza que los adultos. La tabla 7 permite dar cuenta de esta realidad.
Tabla 7. PROPORCIÓN DE POBLACIÓN EN ESTADO DE POBREZA SEGÚN DIFERENTES GRUPOS DE EDADES EN LIMA Y EN EL PERÚ EN 2004 (EN %)
Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 2004.
37Tanto en Lima como en el resto del país, observamos que los niños, niñas y adolescentes se encuentran en una situación menos favorable que los adultos en lo que se refiere a la pobreza, puesto que su peso disminuye a medida que un individuo pasa de la primera infancia a la edad adulta. Observamos, por ejemplo, que en Lima el 46,2% de niños y niñas de 3 a 5 años se encuentra en esta condición contra el 32,1% de los adultos, mientras que esta proporción va disminuyendo a lo largo de la infancia: el 47,6 % de los niños y niñas de 6 a 11 años y el 44% de los adolescentes de 12 a 17. En el periodo 1997-2004, es interesante observar en la tabla 8 la variación de esta proporción de población en estado de pobreza por grupo de edades en Lima Metropolitana.
Tabla 8. PROPORCIÓN DE LA POBLACIÓN EN ESTADO DE POBREZA EN LIMA METROPOLITANA SEGÚN CUATRO GRUPOS DE EDADES ENTRE 1997 Y 2004 (EN %)
Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 1997-2004.
Figura 14. VARIACIÓN DE LA PROPORCIÓN DE POBREZA EN LIMA SEGÚN CUATRO GRUPOS DE EDADES ENTRE 2001 Y 2004 (EN %)
Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 1997-2004.
38La figura 14 muestra en los últimos cuatro años de este periodo cifras relativamente similares entre la primera infancia, la niñez y la adolescencia, aunque el grupo de edades de 12 a 17 años se ve un poco menos afectado en promedio por la pobreza dentro de la población menor de 18 años.
IV. El trabajo de los niños, niñas y adolescentes en 2008
39Los datos comentados en esta presentación del trabajo infantil y adolescente en el Perú, y particularmente en Lima, provienen de la última Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO), realizada en el Perú en 2008 por el INEI y cuyos resultados son presentados en Perú: niños, niñas y adolescentes que trabajan, 1993-2008 (Alarcón G. 2009). Las fuentes de esta encuesta son susceptibles de verse afectadas por un subregistro, especialmente en las zonas rurales, donde muchos niños y niñas participan en las labores agrícolas con sus familias, sin recibir remuneración alguna, lo que ocasiona que su actividad se confunda con el trabajo doméstico. Paralelalemente, se puede presumir también un subregistro de los niños y adolescentes trabajadores menores de 14 años en las zonas urbanas, debido al carácter ilícito de esta introducción en el trabajo que no está registrada por los empleadores en el momento de la encuesta. Por estos motivos, es probable que los resultados de la ENAHO 2008 no reflejen la magnitud total del trabajo de los niños, niñas y adolescentes en el Perú, aunque los datos siguen siendo muy interesantes para conocer en detalle las características de este fenómeno.
1. Las tasas de actividad económica de niños, niñas y adolescentes por departamento
40La participación de los niños, niñas y adolescentes en las actividades económicas de un país es estimada por una tasa de actividad que calcula a la población económicamente activa (PEA) infantil y adolescente con relación al número total de los individuos de este grupo de edades (6-17 años). La tabla 9 detalla este resultado en cada departamento del Perú en 2008 teniendo en cuenta la distinción entre niños de 6 a 13 años y adolescentes de 14 a 17 años, y precisando las tasas de urbanización y de pobreza en cada uno de estos territorios.
41Según el INEI, en 2008, el 29,8 % de los niños y adolescentes peruanos, varones y mujeres, realizaba una actividad económica, lo que representaba en valor absoluto a aproximadamente 2'255.100 personas de 6 a 17 años, con una ligera mayoría de niños y niñas de 6 a 13 años: 52,2% del total contra el 47,8% de adolescentes de 14 a 17 años (en edad legal de acceso al mercado laboral) y una mayoría de niños varones frente a las niñas (el 54,7% contra el 45,3%). En el conjunto del país, el 40% de los adolescentes de 14 a 17 años está involucrado en una ocupación económica, contra el 21,9% de los niños y niñas de 6 a 13 años (Alarcón G. 2009). En la tabla 9, observamos que las tasas más altas de niños, niñas y adolescentes trabajadores en el Perú se encuentran en los departamentos de Huancavelica (65%), Puno (64%), Huánuco (59,8%), Amazonas (59,6%), Apurímac (50%), Cusco (44,3%), y Pasco (43,6%), los cuales se ubican (a excepción de Amazonas) en la cordillera de los Andes (la sierra) y presentan las tasas de pobreza más importantes del país, que van de un 58,4% para Cusco al 82,1% para Huancavelica. Una lectura más profunda de esta tabla muestra también que en estos departamentos la proporción de niños y niñas trabajadores de 6 a 13 años es más importante y que los niveles de urbanización son los más bajos del país. En el departamento de Amazonas, el 74,2% de la PEA de 6 a 17 años, son niños y niñas de 6 a 13 años, que son de hecho mucho más numerosos que los adolescentes trabajadores de 14 a 17 años. Vienen luego Huánuco (73,4%), Huancavelica (73,1%), Puno (72,1%), Pasco (70,1%), Apurímac (67,9%) y Cusco (56,6%), que son exactamente los mismos departamentos citados anteriormente y los menos urbanizados en el Perú (en la sierra el 50,9% de la población se encuentra urbanizada en promedio). A la inversa, los departamentos ubicados en la costa del Pacífico (costa) y en la cuenca amazónica (selva) muestran una proporción de niños y niñas trabajadores de 6 a 13 años bastante menor (un promedio de 38,8%) y las tasas de población urbanizada son las más elevadas del país (con un promedio de 78,6%).
Tabla 9. PEA DE NIÑOS Y ADOLESCENTES, Y TASAS DE URBANIZACIÓN Y POBREZA, POR DEPARTAMENTO EN EL PERÚ EN 2008
42En el conjunto del Perú, la tasa de actividad de los niños, niñas y adolescentes varía muy sensiblemente entre las ciudades y el campo. Según resultados adicionales de la ENAHO de 2008, la tasa de inserción de niños, niñas y adolescentes de 6 a 17 años en una actividad económica es menor en las zonas urbanas del país (14,2%) que en las zonas rurales, donde es hasta tres veces más alta (47%), lo que corresponde en valor absoluto a 625.300 niños, niñas y adolescentes trabajadores en el medio urbano contra 1.490.100 aproximadamente en el medio rural.
43Esta variación de la tasa de actividad de los niños, niñas y adolescentes según el medio de residencia se refiere particularmente a una introducción económica a temprana edad de los niños, niñas y adolescentes en el sector primario de la agricultura y la ganadería, que no exigen ningún nivel de calificación técnica. Además, la participación de los niños y adolescentes en las labores agrícolas es ampliamente aceptada e incluso valorada por los padres en los campos andinos. Dentro de esta distinción entre zonas de residencia urbana y rural, es también interesante observar las desproporciones entre grupos de edades, es decir entre los niños y niñas de 6 a 13 años y los adolescentes de 14 a 17 años, según los resultados de la ENAHO de 2008 (figura 15).
Figura 15. PARTICIPACIÓN ECONÓMICA DE LOS NIÑOS DE 6 A 13 AÑOS Y DE LOS ADOLESCENTES DE 14 A 17 AÑOS SEGÚN ZONA DE RESIDENCIA (URBANA VERSUS RURAL) EN EL PERÚ EN 2008 (EN %)
Fuente: Alarcón G. 2009 - INEI.
44La tasa de participación económica de los niños y niñas de 6 a 13 años es del 7% en las ciudades frente al 40,1% en el campo. Esta marcada diferencia se debe a la costumbre en las zonas andinas de hacer participar a los niños y niñas en las actividades económicas domésticas, como la vigilancia de los rebaños, la agricultura (arranque de las malas hierbas, limpieza de los canales de riego, sembrío y cosecha ligera) y los trabajos de artesanía. En cuanto a los adolescentes, varones y mujeres de 14 a 17 años, el 27% de este grupo de edades realiza una actividad económica en las zonas urbanas del país y esta tasa se duplica en las zonas rurales hasta alcanzar el 59,9%. Una vez más, la aceptación del trabajo de los adolescentes en el campo ayuda a comprender este fenómeno generalizado. Veremos un poco más adelante los sectores de actividad en los que son empleados los adolescentes, tanto en las ciudades como en el campo.
- 3 Para facilitar la realización y la lectura de esta figura, tomamos en consideración solo los depar (...)
45Por otro lado, observamos en la tabla 9 una correlación bastante pronunciada entre la tasa de ocupación de los niños, niñas y adolescentes y la tasa de pobreza, especialmente en los departamentos de la cordillera de los Andes (figura 16)3.
Figura 16. TASA DE ACTIVIDAD DE NIÑOS Y ADOLESCENTES (6 A 17 AÑOS) Y TASA DE POBREZA EN ALGUNOS DEPARTAMENTOS DE LA COSTA Y SIERRA EN 2008 (EN %)
Fuente: Alarcón G. 2009 e INEI, Censos Nacionales 2007: XI de Población y VI de Vivienda.
46La proporción de niños, niñas y adolescentes trabajadores y la pobreza tienen una estrecha relación en la mayoría de los departamentos de la costa y sierra, ya que salvo algunas excepciones (Piura, Pasco, Ayacucho, Apurímac), ambas tasas aumentan de manera ordenada. Las ingresos insuficientes de los adultos son complementados con el trabajo de los más jóvenes, lo que representa una estrategia de lucha contra la precariedad en la organización diaria de las familias. Este punto crucial en la comprensión del fenómeno será analizado más adelante, pero ya se puede afirmar que no es la única explicación de la participación laboral de los niños, niñas y adolescentes en el contexto cultural peruano.
47Por último, observamos en la tabla 9 que el mayor número de niños, niñas y adolescentes trabajadores en el Perú (en valor absoluto) se encuentra, respectivamente, en los departamentos de Puno, Lima, Cusco, Cajamarca, Huánuco y Junín, que incluyen alrededor de 1.157.500 niños, niñas y adolescentes trabajadores, lo que representa el 51,3% en el ámbito nacional. En este grupo, la particularidad de la metrópoli de Lima-Callao es ser la zona del Perú donde se concentra —en términos absolutos— el mayor número de trabajadores adolescentes de 14 a 17 años: alrededor de 153.500 (84,1% de los 213.200 niños, niñas y adolescentes trabajadores de 6 a 17 años) contra 106.450 y 76.080 aproximadamente, respectivamente para Cajamarca y Cusco (mapa 2). Esta observación es una justificación importante en la elección de Lima como lugar de estudio para esta investigación. Su especificidad como zona casi exclusivamente urbana, donde se observa una gran diversidad en las formas de actividad de los adolescentes trabajadores, es también otro motivo fundamental de esta elección.
2. Las tasas de actividad y la situación demográfica por departamento
48Las tasas de actividad de los niños, niñas y adolescentes en cada departamento del Perú dependen estrechamente de ciertos indicadores demográficos propios de cada uno de estos territorios (tabla 10).
- 4 Para facilitar la realización y la lectura de esta figura, solo se ha tomado en cuenta a los depar (...)
49Así como vemos en la tabla 10, la participación de los niños, niñas y adolescentes en una actividad económica es particularmente importante en los departamentos de la sierra, sobre todo en los de Huancavelica (65%), Puno (64%), Huánuco (59,8%) y Apurímac (50%), donde una mayoría de la población menor de 18 años integra la población económicamente activa. Estas cifras se explican en parte por el alto índice de dependencia demográfica en estos departamentos (respectivamente 85,2%; 64,2%, 74,9%, y 81,9%). Este refleja los potenciales recursos humanos de los que dispone una familia. Es el cociente entre las personas consideradas como dependientes por su edad (los niños menores de 15 años y las personas mayores de 64 años) y los individuos económicamente productivos por su edad (el grupo de edades comprendido entre 15 y 64 años), multiplicado por 100. Por ejemplo, el departamento de Cusco tiene un índice de dependencia demográfica de 68,3%, lo que significa que cerca de 68 personas son dependientes (menor de 15 años y mayor de 64 años) por 100 activos (de 15 a 64 años) en este departamento. Cuanto más se acerca este índice al 100%, más nos encontramos en una situación donde la diferencia numérica es pequeña entre la población “dependiente” y la población en edad de trabajar. Esta última debe entonces aumentar el número de horas de trabajo para satisfacer las necesidades de toda la población o acudir (como es el caso) a una mano de obra más joven, es decir a menores de 15 años. Mientras tanto, la tasa global de fecundidad en cada departamento determina la parte de población dependiente dentro de la población total. Por ejemplo, en el departamento de Huanca-velica, la tasa de dependencia demográfica es la más alta (85,2%), con un número importante de población “dependiente demográfica”, reforzado por un indicador coyuntural de fecundidad de 2,5 hijos por mujer, que es también uno de los más altos del país (figura 17)4.
Mapa 2. Importancia del número de adolescentes trabajadores de 14 a 17 años en cada departamento del Perú en 2008 (en valor absoluto)
Tabla 10. TASA DE ACTIVIDAD DE LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES DE 6 A 17 AÑOS E INDICADORES DEMOGRÁFICOS POR DEPARTAMENTO EN EL PERÚ EN 2008 (EN %)
50El índice de dependencia demográfica en cada departamento permite explicar parcialmente la entrada de los niños, niñas y adolescentes en una actividad económica. Cuanto más se acerque este índice al 100%, más la población activa que aporta los recursos humanos en mano de obra está a cargo de la población “dependiente” (población potencial-mente no activa): esto conduce a una mayor tasa de participación de los niños, niñas y adolescentes de 6 a 17 años. En los departamentos urbanizados de la costa del Pacífico (costa), donde la participación económica de los niños, niñas y adolescentes de 6 a 17 años es proporcionalmente la más baja (19,6% en promedio contra 47,4% en la sierra), el índice de dependencia demográfica también es menor (54,5% en promedio contra 71,1% en la sierra), reflejando un mayor capital humano de los inviduos de 15 a 64 años para encargarse de las actividades económicas en estos departamentos.
Figura 17. TASA DE ACTIVIDAD DE NIÑOS Y ADOLESCENTES (6 A 17 AÑOS) E ÍNDICE DE DEPENDENCIA DEMOGRÁFICA EN ALGUNOS DEPARTAMENTOS DE LA COSTA Y SIERRA EN 2008 (EN %)
Fuente: Alarcón G. 2009 e INEI, Censos Nacionales 2007: XI de Población y VI de Vivienda.
51Por último, observamos en la tabla 10 que los tres departamentos de los Andes (Huancavelica, Puno y Huánuco) que presentan en el Perú la tasa más alta de actividad de niños, niñas y adolescentes de 6 a 17 años, revelan una situación de transición demográfica llamada “incipiente” (primera fase). Se caracteriza por altas tasas de fecundidad y mortalidad, así como una estructura poblacional mayormente compuesta por jóvenes menores de 15 años, correspondiente al alto índice de dependencia demográfica descrito anteriormente. Estos departamentos cuentan con un número significativo de niños, niñas y adolescentes de 6 a 17 años, los cuales representan una mano de obra disponible para integrar la población activa. La mano de obra adulta, proporcionalmente menor con relación a toda la población, se compensa asimismo con una contribución económica de los más jóvenes.
3. Las tasas de asistencia escolar de los niños, niñas y adolescentes trabajadores
52La tasa de asistencia escolar de los niños, niñas y adolescentes trabajadores en el Perú figura en la tabla 11, según los datos de la ENAHO realizada en el ámbito nacional en 2007. Esta tasa supone la matrícula previa de un alumno en una institución educativa. Este dato es complementado por la tasa de no asistencia, que comprende a la vez a los niños, niñas y adolescentes trabajadores no matriculados en una escuela o colegio y los que, aunque estuvieron matriculados a principios de año escolar, no asistían más al momento de la encuesta.
Tabla 11. ASISTENCIA E INASISTENCIA ESCOLAR DE NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES DE 6 A 17 AÑOS EN EL PERÚ SEGÚN GRUPOS DE EDADES, ZONA DE RESIDENCIA Y SEXO (EN %)
Fuente: ENAHO 2007 - INEI.
53No sorprende ver en la tabla 11 que la asistencia escolar es más importante para los niños y niñas trabajadores de 6 a 13 años, que para los adolescentes trabajadores de 14 a 17 años en todo el país, lo que evidencia que el ausentismo escolar se hace más frecuente a medida que aumenta la edad. En cambio, observamos que la no asistencia escolar es casi diez puntos más importante en las zonas urbanas del país, esto sin tomar en consideración los grupos de edades y el sexo de los niños y adolescentes de esta encuesta. Esta observación merece ser subrayada porque contradice la creencia común de que la no asistencia escolar de los niños, niñas y los adolescentes trabajadores en el Perú es una particularidad de las zonas andinas por la lejanía de las escuelas para los jóvenes que viven en los lugares más recónditos.
54En cuanto a la problemática de esta investigación sobre los factores de la deserción escolar de los adolescentes trabajadores en Lima, la tabla 11 muestra que el 40,5% de los adolescentes trabajadores no asiste al colegio en el medio urbano en el Perú (en la metrópoli de Lima-Callao) y que, en el conjunto del país, este fenómeno afecta casi tanto a los adolescentes varones (41,7%) como a las mujeres (40,2%). Es importante precisar que dentro de este 40,5% de adolescentes trabajadores peruanos de 14 a 17 años que viven en las ciudades y que no asisten más a la escuela, algunos de los que tienen entre 16 y 17 años han terminado el colegio, lo que explica que sean registrados como “no asistentes escolares”. Es probable que la tasa real de adolescentes trabajadores de este grupo de edad que hayan abandonado la escuela, bordee el 30%.
4. Las actividades realizadas por los niños y adolescentes trabajadores
55Las informaciones referentes a las principales ocupaciones de los niños, niñas y adolescentes trabajadores entre 6 y 17 años han sido recogidas por la ENAHO 2008, teniendo como base los dos grupos de edades mencionados anteriormente: antes de 14 años (de 6 a 13 años) y después de 14 años (de 14 a 17 años). La tabla 12 presenta estos resultados para el grupo de edad de 6 a 13 años.
56Las actividades de los niños y niñas menores de 13 años se concentran esencialmente en los trabajos manuales y no técnicos, escasamente o no remunerados. El 79,9% de los niños y niñas trabajadoras menores de 13 años en el conjunto del país se dedica, por su parte, a los trabajos agrícolas, a la ganadería o al cuidado de animales. Estas actividades llegan a ocupar al 91,3% de los que residen en el medio rural. En las zonas urbanas, el abanico de actividades es mucho más amplio que en el campo. La ayuda al funcionamiento de la empresa familiar, el trabajo doméstico, los servicios en la calle, la elaboración de productos destinados a la venta ambulatoria o en un punto fijo (en un mercado) son actividades que presentan porcentajes significativos (respectivamente con el 56,9%, el 12,2%, el 2,2% y el 1,9%), mientras que las actividades referentes al sector agrícola permanecen fuertemente representadas (24,8%). La tabla 13 muestra los sectores de actividad de los adolescentes de 14 a 17 años.
Tabla 12. ACTIVIDADES ECONÓMICAS REALIZADAS POR NIÑOS DE 6 A 13 AÑOS SEGÚN ZONA DE RESIDENCIA Y SEXO EN EL PERÚ EN 2008 (EN %)
Fuente: Alarcón G. 2009 - INEI.
- 5 En las figuras 19 y 20 sólo se ha tomado en cuenta los sectores de actividad que tienen una repres (...)
57En cuanto a los adolescentes trabajadores mayores de 14 años, casi la mitad de ellos (47,3%) se encarga de ocupaciones vinculadas a la agricultura, que es de lejos el primer sector de actividad. Luego viene la venta en una tienda de abarrotes o en un mercado (10,7%), el trabajo doméstico en tercer lugar (5,7%), seguido de la lavandería y limpieza (5,1%). La situación por zona de residencia muestra diferencias sustanciales. Mientras que el 75,2% de los adolescentes trabajadores que viven en zonas rurales realiza tareas agrícolas, los que viven en un ambiente urbano se reparten en no menos de una quincena de actividades, tales como la cocina, el comercio, el tejido, la lavandería, el trabajo doméstico e incluso el sector de construcción y el manejo de vehículos ligeros (figuras 18 y 19). Esto ilustra la gran variedad de este fenómeno en las ciudades, y en particular en Lima5.
Tabla 13. ACTIVIDADES ECONÓMICAS REALIZADAS POR LOS ADOLESCENTES DE 14 A 17 AÑOS SEGÚN ZONA DE RESIDENCIA Y SEXO, EN EL PERÚ EN 2008 (EN %)
Fuente: Alarcón G. 2009 - INEI.
Figura 18. REPARTICIÓN DE LOS ADOLESCENTES TRABAJADORES DE 14 A 17 POR SECTOR DE ACTIVIDAD EN LAS ZONAS RURALES DEL PERÚ EN 2008 (EN %)
Fuente: Alarcón G. 2009 - INEI.
58Frente al predominio de los trabajos agrícolas en las zonas rurales del Perú, se manifiesta una importante heterogeneidad de actividades para los adolescentes trabajadores de 14 a 17 años que residen en zonas urbanas.
Figura 19. REPARTICIÓN DE LOS ADOLESCENTES TRABAJADORES DE 14 A 17 AÑOS POR SECTOR DE ACTIVIDAD EN LAS ZONAS URBANAS DEL PERÚ EN 2008 (EN %)
Fuente: Alarcón G. 2009 - INEI.
59Por último, cabe señalar cierto equilibrio en el reparto de los adolescentes trabajadores mayores de 13 años entre las zonas urbanas y rurales (434.100 y 577.700 respectivamente), contrariamente a la situación de los niños trabajadores menores de 13 años que se mantiene como un fenómeno vinculado al campo (912.400 contra aproximadamente 191.200 en las ciudades). Estos resultados indican que la incidencia del trabajo aumenta con la edad más fuertemente en las ciudades que en el campo. Estos datos cuantitativos son retomados en el capítulo 3 para justificar la elección de las categorías económicas escogidas para el trabajo de campo y constituir una muestra de 42 adolescentes trabajadores de 12 a 17 años que viven en Lima.
5. La heterogeneidad del trabajo adolescente en Lima
60Las cifras presentadas por la ENAHO en 2008 revelan que el número de niños, niñas y adolescentes trabajadores en la metrópoli de Lima-Callao asciende aproximadamente a 213.200, de los cuales 179.300 tienen entre 14 y 17 años. Representan al 16,63% de los adolescentes trabajadores de este grupo de edades en el conjunto del Perú (cfr. mapa 2).
- 6 Esta disposición se da en cumplimiento del Convenio 138 de la OIT que establece como mínimo legal (...)
61La importancia del trabajo adolescente en Lima es principalmente visible en ciertas actividades como el comercio ambulatorio o en los mercados, los “pequeños” servicios efectuados en la calle y las ocupaciones domésticas extrafamiliares, todas ellas relacionadas con el sector informal de la economía y que, la mayoría de las veces, se realizan en la clandestinidad. El número de adolescentes asalariados cuya actividad entra en el marco de normas de trabajo que procuran protegerlos es extremadamente débil en la medida en que la legislación peruana fija en 14 años la edad mínima para que un adolescente pueda entrar oficialmente al mercado laboral6. Al margen de este sector protegido legalmente, las actividades más frecuentes y visibles de los adolescentes en el espacio metropolitano de Lima y Callao son:
- la venta ambulatoria de golosinas y cigarrillos, periódicos y revistas, billetes de lotería, servicio de agua y flores cerca de los cementerios,
- la venta organizada en un puesto comercial ubicado en un mercado, el embalaje de publicidades dentro de un sobre plástico en una fábrica,
- el transporte de paquetes y otras encomiendas en un mercado, la preparación de alimentos y la cocina en el domicilio de una familia,
- el lustrado de zapatos en los pasos de peatones (especialmente cerca de los paraderos de autobús),
- el lavado de parabrisas en las avenidas de gran circulación,
- el lavado, el cuidado y la vigilancia de automóviles (en particular cerca de los restaurantes u otros lugares de esparcimiento),
- el canto en los autobuses (acompañado de la venta de golosinas),
- las actividades de entretenimiento (malabares) en los cruces de avenidas o semáforos,
- la distribución de folletos en lugares de gran afluencia de público (especialmente en el centro de Lima),
- el cuidado de niños pequeños,
- la limpieza y el lavado de ropa en el domicilio de terceros,
- el cuidado de una persona de la tercera edad en su domicilio,
- las diversas actividades vinculadas a la artesanía (carpintería y costura),
- la cobranza de pasajes en los microbuses.
Foto 2: Un adolescente de 15 años que vende revistas para niños en una calle del centro de Lima (30 de marzo de 2008)
62Otras actividades económicas peligrosas para la salud, el desarrollo y la integridad de los adolescentes, y que se realizan en un contexto clandestino, son:
- la recolección, clasificación y venta de residuos reciclables en la calle, cerca del mercado o de los vertederos,
- la venta de drogas,
- el comercio sexual en la calle, en los hoteles de paso o en las discotecas y otros lugares de espectáculos o de diversión (bar, espectáculos de streap-tease).
63En este amplio conjunto de actividades, es a veces delicado hacer una distinción entre una ocupación de la calle y la mendicidad, sobre todo cuando esta se oculta detrás de una actividad en la que se pide una propina al cliente. A pesar de eso, muchas actividades como cantar, bailar o tocar un instrumento musical en los transportes públicos o en las plazas, y el lavado de parabrisas en las avenidas de gran circulación, entran en la categoría de trabajo y se caracterizan por ganancias muy variables. Por último, el trabajo de los adolescentes se distingue del de los adultos: aun cuando se trata de una ocupación realizada en un marco formal, pueden ser contratados y despedidos con más flexibilidad de acuerdo con las fluctuaciones del mercado, su remuneración es más baja y carecen de derechos laborales. Sus condiciones de trabajo están muchas veces marcadas por la precariedad, pero revelan simultáneamente una multiplicidad de experiencias humanas que van de la inclusión a la exclusión, particularmente con relación a la cuestión de su preferencia por la escuela.
64En esta investigación, el trabajo de campo realizado a base de una muestra de 42 adolescentes trabajadores de Lima y Callao ha intentado abarcar la gran variedad de casos, que fueron agrupados en torno a cuatro categorías económicas detalladas, comentadas y justificadas en el capítulo 3:
- el trabajo doméstico extrafamiliar (13 casos),
- la venta y los servicios realizados en un punto fijo (13 casos),
- el comercio ambulatorio y otros servicios en la calle (10 casos),
- la recuperación, clasificación y venta de residuos reciclables (6 casos).
Notes
1 Todos los individuos de la misma edad y del mismo sexo tienen en principio necesidades calóricas idénticas, sin importar su zona geográfica de residencia.
2 Otra base de datos del INEI, no publicada, muestra un porcentaje de pobreza en Lima Metropolitana que equivale al 30,9% en 2004 y al 32,6% en 2005. Para una descripción y un análisis de datos sobre la pobreza en el Perú, y especialmente en Lima, he optado en este trabajo por atenerme a los datos oficiales del INEI disponibles en la página web de esta institución (www.inei.gob.pe) que abarca el periodo 1997-2004.
3 Para facilitar la realización y la lectura de esta figura, tomamos en consideración solo los departamentos de la costa del Pacífico y de la sierra, que representan a la gran mayoría de los niños, niñas y adolescentes trabajadores del país.
4 Para facilitar la realización y la lectura de esta figura, solo se ha tomado en cuenta a los departamentos de la costa pacífica y de la cordillera de los Andes, que representan a la gran mayoría de los niños, niñas y adolescentes trabajadores del país.
5 En las figuras 19 y 20 sólo se ha tomado en cuenta los sectores de actividad que tienen una representación de por lo menos el 1% de adolescentes de 14 a 17 años.
6 Esta disposición se da en cumplimiento del Convenio 138 de la OIT que establece como mínimo legal los 16 años, excepto en el caso de los países en vías del desarrollo (como el Perú), los cuales pueden establecerlo en 14.
Table des illustrations
Titre | Figura 4. EVOLUCIÓN DE LA POBLACIÓN EN EL PERÚ ENTRE 1955 Y 2005 (NÚMERO DE INDIVIDUOS) |
---|---|
Légende | Fuente: INEI, Perú: estimaciones y proyecciones de población, 1950-2050 (2001). |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-1.jpg |
Fichier | image/jpeg, 335k |
Titre | Figura 5. EVOLUCIÓN DE LA PROPORCIÓN DE JÓVENES MENORES DE 20 AÑOS EN EL PERÚ ENTRE 1955 Y 2005 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Perú: estimaciones y proyecciones de población, 1950-2050 (2001). |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-2.jpg |
Fichier | image/jpeg, 433k |
Titre | Figura 6. EVOLUCIÓN DE LA TASA DE CRECIMIENTO DEMOGRÁFICO EN EL PERÚ ENTRE 1955 Y 2005 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Perú: estimaciones y proyecciones de población, 1950-2050 (2001). |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-3.jpg |
Fichier | image/jpeg, 374k |
Titre | Figura 7. PIRÁMIDE DE LAS EDADES DE LA POBLACIÓN PERUANAEN 2005 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Perú: estimaciones y proyecciones de población, 1950-2050 (2001). |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-4.jpg |
Fichier | image/jpeg, 516k |
Titre | Figura 8. EVOLUCIÓN DE LA DISTRIBUCIÓN DE LOS GRUPOS DE EDADES EN LA POBLACIÓN MENOR DE 20 AÑOS EN EL PERÚ ENTRE 1955 Y 2005 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Perú: estimaciones y proyecciones de población, 1950-2050 (2001). |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-5.jpg |
Fichier | image/jpeg, 484k |
Titre | Figura 9. EVOLUCIÓN DE LA REPARTICIÓN ENTRE LA POBLACIÓN URBANA Y RURAL DEL PERÚ ENTRE 1940 Y 2007 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, censos nacionales de población 1940-2007. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-6.jpg |
Fichier | image/jpeg, 405k |
Titre | Figura 10. EVOLUCIÓN DE LA REPARTICIÓN DE LOS JÓVENES MENORES DE 20 AÑOS ENTRE LAS ZONAS URBANAS Y RURALES DEL PERÚ ENTRE 1980 Y 2005 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Perú: estimaciones y proyecciones de población, 1950-2050 (2001). |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-7.jpg |
Fichier | image/jpeg, 418k |
Titre | Tabla 1. PROGRESIÓN EN EL SISTEMA ESCOLAR PERUANO SEGÚN LA EDAD DE LOS NIÑOS Y NIÑAS (6 A 11 AÑOS) Y ADOLESCENTES (12 A 16 AÑOS) |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-8.jpg |
Fichier | image/jpeg, 140k |
Titre | Tabla 2. DATOS RELATIVOS A LOS ESTABLECIMIENTOS PÚBLICOS Y PRIVADOS DEL SISTEMA ESCOLAR PERUANO |
Légende | Fuente: Ministerio de Educación-Dirección de Medición Educativa 2007 Disponible en : <http://www2.minedu.gop.pe/umc/>; <http://escale.minedu.gop.pe/>. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-9.jpg |
Fichier | image/jpeg, 211k |
Titre | Tabla 3. TASA DE ASISTENCIA E INASISTENCIA ESCOLAR DE NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES SEGÚN GRADO DE URBANIZACIÓN DE LA ZONA DE RESIDENCIA Y SEXO, EN EL PERÚ EN 2005 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares 2005 (abril-diciembre). |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-10.jpg |
Fichier | image/jpeg, 373k |
Titre | Tabla 4. MOTIVOS DE INASISTENCIA ESCOLAR DE NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES SEGÚN ZONA DE RESIDENCIA, EN EL PERÚ EN 2006 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares 2006. Trimestre III. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-11.jpg |
Fichier | image/jpeg, 161k |
Titre | Tabla 5. PROPORCIÓN DE LA POBLACIÓN EN ESTADO DE POBREZA (RELATIVA Y EXTREMA) ENLIMA Y EL RESTO DEL PAÍS, ENTRE 1997 Y 2004 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 1997-2004. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-12.jpg |
Fichier | image/jpeg, 336k |
Titre | Figura 11. EVOLUCIÓN DE LA PROPORCIÓN DE POBLACIÓN EN ESTADO DE POBREZA EN LIMA Y EN EL RESTO DEL PERÚ ENTRE 1997 Y 2004 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 1997-2004. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-13.jpg |
Fichier | image/jpeg, 125k |
Titre | Tabla 6. PROPORCIÓN DE POBREZA TOTAL EN EL PERÚ SEGÚN EL NIVEL DE URBANIZACIÓN ENTRE 1997 Y 2004 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 1997-2004. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-14.jpg |
Fichier | image/jpeg, 208k |
Titre | Figura 12. VARIACIÓN DE PROPORCIONES DE POBREZA TOTAL EN EL PERÚ SEGÚN NIVEL DE URBANIZACIÓN ENTRE 1997 Y 2004 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 1997-2004. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-15.jpg |
Fichier | image/jpeg, 261k |
Titre | Figura 13. VARIACIÓN DE PROPORCIONES DE POBREZA TOTAL EN EL PERÚ SEGÚN NIVEL DE URBANIZACIÓN ENTRE 2001 Y 2004 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 2001-2004. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-16.jpg |
Fichier | image/jpeg, 185k |
Titre | Tabla 7. PROPORCIÓN DE POBLACIÓN EN ESTADO DE POBREZA SEGÚN DIFERENTES GRUPOS DE EDADES EN LIMA Y EN EL PERÚ EN 2004 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 2004. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-17.jpg |
Fichier | image/jpeg, 143k |
Titre | Tabla 8. PROPORCIÓN DE LA POBLACIÓN EN ESTADO DE POBREZA EN LIMA METROPOLITANA SEGÚN CUATRO GRUPOS DE EDADES ENTRE 1997 Y 2004 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 1997-2004. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-18.jpg |
Fichier | image/jpeg, 158k |
Titre | Figura 14. VARIACIÓN DE LA PROPORCIÓN DE POBREZA EN LIMA SEGÚN CUATRO GRUPOS DE EDADES ENTRE 2001 Y 2004 (EN %) |
Légende | Fuente: INEI, Encuesta Nacional de Hogares. IV Trimestre 1997-2004. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-19.jpg |
Fichier | image/jpeg, 159k |
Titre | Tabla 9. PEA DE NIÑOS Y ADOLESCENTES, Y TASAS DE URBANIZACIÓN Y POBREZA, POR DEPARTAMENTO EN EL PERÚ EN 2008 |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-20.jpg |
Fichier | image/jpeg, 467k |
Légende | Fuente: Alarcón G. 2009 e INEI, Censos Nacionales 2007: XI de Población y VI de Vivienda. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-21.jpg |
Fichier | image/jpeg, 431k |
Titre | Figura 15. PARTICIPACIÓN ECONÓMICA DE LOS NIÑOS DE 6 A 13 AÑOS Y DE LOS ADOLESCENTES DE 14 A 17 AÑOS SEGÚN ZONA DE RESIDENCIA (URBANA VERSUS RURAL) EN EL PERÚ EN 2008 (EN %) |
Légende | Fuente: Alarcón G. 2009 - INEI. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-22.jpg |
Fichier | image/jpeg, 237k |
Titre | Figura 16. TASA DE ACTIVIDAD DE NIÑOS Y ADOLESCENTES (6 A 17 AÑOS) Y TASA DE POBREZA EN ALGUNOS DEPARTAMENTOS DE LA COSTA Y SIERRA EN 2008 (EN %) |
Légende | Fuente: Alarcón G. 2009 e INEI, Censos Nacionales 2007: XI de Población y VI de Vivienda. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-23.jpg |
Fichier | image/jpeg, 349k |
Titre | Mapa 2. Importancia del número de adolescentes trabajadores de 14 a 17 años en cada departamento del Perú en 2008 (en valor absoluto) |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-24.jpg |
Fichier | image/jpeg, 628k |
Titre | Tabla 10. TASA DE ACTIVIDAD DE LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES DE 6 A 17 AÑOS E INDICADORES DEMOGRÁFICOS POR DEPARTAMENTO EN EL PERÚ EN 2008 (EN %) |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-25.jpg |
Fichier | image/jpeg, 310k |
Légende | Fuente: Alarcón G. 2009 e INEI, Censos Nacionales 2007: XI de Población y VI de Vivienda. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-26.jpg |
Fichier | image/jpeg, 207k |
Titre | Figura 17. TASA DE ACTIVIDAD DE NIÑOS Y ADOLESCENTES (6 A 17 AÑOS) E ÍNDICE DE DEPENDENCIA DEMOGRÁFICA EN ALGUNOS DEPARTAMENTOS DE LA COSTA Y SIERRA EN 2008 (EN %) |
Légende | Fuente: Alarcón G. 2009 e INEI, Censos Nacionales 2007: XI de Población y VI de Vivienda. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-27.jpg |
Fichier | image/jpeg, 372k |
Titre | Tabla 11. ASISTENCIA E INASISTENCIA ESCOLAR DE NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES DE 6 A 17 AÑOS EN EL PERÚ SEGÚN GRUPOS DE EDADES, ZONA DE RESIDENCIA Y SEXO (EN %) |
Légende | Fuente: ENAHO 2007 - INEI. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-28.jpg |
Fichier | image/jpeg, 253k |
Titre | Tabla 12. ACTIVIDADES ECONÓMICAS REALIZADAS POR NIÑOS DE 6 A 13 AÑOS SEGÚN ZONA DE RESIDENCIA Y SEXO EN EL PERÚ EN 2008 (EN %) |
Légende | Fuente: Alarcón G. 2009 - INEI. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-29.jpg |
Fichier | image/jpeg, 238k |
Titre | Tabla 13. ACTIVIDADES ECONÓMICAS REALIZADAS POR LOS ADOLESCENTES DE 14 A 17 AÑOS SEGÚN ZONA DE RESIDENCIA Y SEXO, EN EL PERÚ EN 2008 (EN %) |
Légende | Fuente: Alarcón G. 2009 - INEI. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-30.jpg |
Fichier | image/jpeg, 440k |
Titre | Figura 18. REPARTICIÓN DE LOS ADOLESCENTES TRABAJADORES DE 14 A 17 POR SECTOR DE ACTIVIDAD EN LAS ZONAS RURALES DEL PERÚ EN 2008 (EN %) |
Légende | Fuente: Alarcón G. 2009 - INEI. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-31.jpg |
Fichier | image/jpeg, 403k |
Titre | Figura 19. REPARTICIÓN DE LOS ADOLESCENTES TRABAJADORES DE 14 A 17 AÑOS POR SECTOR DE ACTIVIDAD EN LAS ZONAS URBANAS DEL PERÚ EN 2008 (EN %) |
Légende | Fuente: Alarcón G. 2009 - INEI. |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-32.jpg |
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Légende | Foto 2: Un adolescente de 15 años que vende revistas para niños en una calle del centro de Lima (30 de marzo de 2008) |
URL | http://books.openedition.org/ifea/docannexe/image/6404/img-33.jpg |
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